A estas alturas del siglo XXI, en
plena Era de la Información, a muy poca gente le resultarán desconocidas las
historias que circulan sobre la Piedra Filosofal o Nicolás Flamel, el famoso
alquimista del siglo XIV. Pero, como suele ocurrir en la Edad Media, las
mujeres y sus hazañas quedan muy por debajo de su verdadero nivel y en
ocasiones sus acciones desaparecen, eclipsadas por las de sus esposos, padres o
hijos varones.
Es por ello que me gustaría
resaltar algunos detalles sobre la vida de una mujer: Perenelle Flamel. Fue una
persona adelantada a su tiempo, que compartió sus alegrías, sus penas y por
supuesto su esfuerzo intelectual, con su marido.